SUPERGIRL FANFICS
Como han pedido algunas
personas, quienes me animaron en seguir con estos relatos, además, como veo que
estos fanfics sobre Supergirl son los primeros y únicos escritos en español
para toda Iberoamérica (ya que la mayoría que encuentro en la Internet son
fanfics en inglés sobre Supergirl), decidiré continuar con el segundo fanfic,
espero que les gusten.
SEGUNDO FANFIC: EL PRIMER ENCUENTRO
Imagen el escudo por DC Comics. |
Este fanfic es basado de la película
del Warner Bros de los productores Menahem Golan y Yoram Globus, titulado
Superman IV, “En Busca de la Paz”, bajo idea de Christopher Reeve con la
colaboración de los escritores Lawrece Konner y Mark Rosenthal para esa
historia. En este fanfic, las cosas cambian cuando Supergirl y Superman se
encuentran por primera vez antes de que ocurra el resto de la historia.
Recuerden que Superman fue
creado por Jerry Siegel y Joe Shuster y es propiedad de DC Comics, y que
Supergirl fue iniciada por Mort Weisinger, Otto Binder y Al Plastino y es propiedad de
DC Cómics.
PRIMER CAPÍTULO: UN REGRESO, UN ENCUENTRO
Supergirl, basado del personaje de la Androide 18 de Dragon Ball Z (de Akira Toriyama), hecha por Juan Carlos Quenguan. |
Cuando Kara regresó a Argos
City, era recibida por los habitantes argonianos con júbilo, en especial los
padres de la joven, con ellos compartió sus relatos de experiencias que vivió
en La Tierra en la búsqueda del Omegahedron.
Varios meses después, Kara empezó
a extrañar de aquel humano con quien se enamoró: Ethan, quien aparecía cada vez
en sus pensamientos. A pesar de ello, Kara aprendía más sobre el Universo, los
cálculos exactos y todas las formas de vida, aunque siguió siendo la misma
distraída, atolondrada, tímida e inquieta; su comportamiento y trato hacia sus
padres y todos los habitantes de Argos City ha cambiado, ya que, era el mismo
que se comportaba los humanos, dejando preocupados a algunos.
Un día, Zor-El llamó a Kara,
mientras ella veía en uno de los grandes cristales el regreso de Kal-El a La
Tierra.
-Hija, necesito hablar
contigo –.
-¿Me decías padre? –
preguntó Kara.
-Quiero preguntarte algo y
espero que me respondas con toda sinceridad – dijo en tono serio Zor-El.
-Claro padre, dime – respondió
Kara.
-En estos días te he visto
reflexiva y nostálgica, quiero saber, si cuando estuviste en La Tierra, ¿dejaste
algo pendiente por allá? – Examinó Zor-El.
-¿Qué si dejé algo
pendiente? – la joven no entendía la pregunta.
-Si hija – atinó Zor-El, al
instante, Kara dejó de mirar el cristal y se volteó para mirar el rostro de su
progenitor.
-La verdad… no… pero te
confieso que cuando estuve en La Tierra, me enamoré… de un ser humano – contestó
tímida Kara.
-¿Cómo así hija? - cuestionó
Zor-El, en ese instante, Kara temía por una reacción dura de su padre -
tranquila, sabes bien que hoy día has madurado en conocimiento y sabiduría para
tomar tus propias decisiones, a pesar de que aún seas joven -.
-Nunca he vivido algo tan
extraño como en enamorarme de alguien – contaba Kara con un poco de serenidad –
el humano de quien me enamoré se llama Ethan, nos enamoramos a primera vista,
de ahí, recibí mi primer beso, a la vez, entendí lo que es amar y querer entre
ambos sexos de la humanidad; inclusive, comprendí que por un ser querido uno
sacrifica todo, demostrando cariño y compasión… - mientras Kara explicaba, llegó
Allura, escuchó dicha conversación e interrumpió
-Kara… escuché lo que estás
diciendo y quiero aclararte algo…-.
-Te escucho madre– dijo un
poco temerosa Kara.
-Primero que todo, quiero que
recuerdes aquella vez lo que sucedió a tu primo Kal, cuando se enamoró de una
humana, de tal manera que, por amor dejó sus poderes y su misión en proteger al
Planeta Tierra, viviendo como un humano; sino fuera por la intromisión del
general Zod al planeta, tu primo estaría el resto de su existencia como mortal–
explicó Allura, dejando reflexiva a su hija.
-¿Qué quieres decir…?– inquirió
Kara.
Kara Zor-El / Supergirl, basado del personaje de la Androide 18 de Dragon Ball Z (de Akira Toriyama), hecha por Juan Carlos Quenguan. |
-Quiero decir que, si un
kriptoniano se enamorara de un ser de otro mundo, en tu caso de un humano,
deberás abandonar todo lo que has hecho, en especial, cuando cumplías una
misión similar al de su primo en La Tierra; eso significa que, deberás
renunciar a tus poderes y olvidarte lo que eres; por lo cual, serás una humana
más que padecerás dolencias, enfermedades y sufrimientos como todo ser humano…
-
-Pero madre, ¿cómo puedo
olvidar este sentimiento por Ethan?– cuestionó triste Kara.
-Regresarás a La Tierra,
allá tendrás el suficiente tiempo para que analizaras. Como viste que Kal regresó
a La Tierra, podrás hablar con él y tomarás tu propia decisión: en decidir si
quieres olvidar tus sentimientos hacia ese ser humano, u olvidarás de ser una
kriptoniana…- las frases de Allura dejó afligida y pensativa a Kara –Ahora,
tengo un mal presentimiento con respecto a Kal-El en La Tierra, en realidad,
supimos que alguien se fugó de una cárcel en ese planeta y tiene planes para
matarlo…-.
-¿A quién te refieres – interrogó
Kara.
-Me refiero a Lex Luthor, uno
de los enemigos de tu primo, la verdad, no sé de los detalles de la fuga ni de
los planes que tiene ese humano, por ello, quiero que regreses a La Tierra,
para que adviertas a Kal y deberás cuidarlo – indicó Zor-El.
Kara pensó si debería o no
ir a La Tierra, a cumplir una nueva misión para proteger la vida de Kal-El, o
dejar todo para que enamorara de Ethan.
-Hay algo más, cuando sobrevivimos
de la explosión, acordamos que si tuviéramos nuestro hijo, él se encargaría de
proteger a Kal, además que, con los conocimientos que adquiriste, podías
aprovechar los recursos naturales de La Tierra, manipular las informaciones
faltantes en los cristales de la Fortaleza, manejar las fuentes de energía y
los diferentes poderes que tanto Kal como tú tienen; si no lo haces, tu primo
podría exponerse ante un grave peligro– aclaró Allura.
-Entonces… ¿ese hijo o hija
única soy yo?– examinó sorprendida Kara ante la explicación de su madre.
-Sí, tú eres– afirmó Zor-El
–por eso somos responsables, al igual que Zaltar, en enseñarte y en dar a
conocer toda la sabiduría que tenemos; de las cuales, Kal-El no lo tiene-.
-Entiendo… Pero no puedo
creer que me digan semejante verdad, supuse que, mi primo tenía bastante
sabiduría para poder resolver dificultades y solucionar toda clase de peligros–
comentó Kara en tono seco –ahora, si ese es mi destino en auxiliar a mi primo
en la misión de salvar a La Tierra, lo aceptaré-.
-Pero hija, si vas a cumplir
esa misión, abandonarás tus sentimientos hacia ese humano– recordó su padre.
-Lo sé, es complicado para
mí– reconoció Kara –precisamente, me propongo regresar a La Tierra, ayudar a
Kal en la misión, después, decidiré sobre mis sentimientos-.
-¿Estás segura de lo que
propones, hija?– Preguntó Allura –recuerde que, a pesar de tener sabiduría y
madurez; aún no eres responsable de usar la totalidad de tus poderes en La
Tierra-.
-Lo estoy madre– examinó
Kara, tomando sus suaves manos con las de ella –te aseguro que, avisaré para
que sean los primeros en saber, ya que, siempre depositaron confianza en mí-.
Horas después, los padres de
Kara convocaron una reunión extraordinaria del Concejo de la ciudad, para
analizar la decisión de Kara en salir de la localidad e ir de nuevo a La Tierra. En esa reunión, Kara explicó las decisiones para salir de Argos City, su
intensión de colaborar con la misión de Kal-El, así mismo, en aclarar y
resolver sus dudas personales.
El Concejo analizó la
petición de Kara y minutos después dictaron el veredicto:
-Kara, hemos analizado su
deseo en colaborar con Kal-El en La Tierra, por lo tanto, este Concejo entiende
que tienes toda la potestad y la suficiente madurez; por el hecho que viajaste
hacia aquel planeta. Observando su manifiesto en enamorarse de aquel ser
humano, implica que debes resolver su situación, para que decidas si renunciar
su sentimiento por aquel humano, o abandonar sus poderes y vivir como una
humana durante el resto de su vida, ¿aceptarás las condiciones que hemos dado?-.
-Acepto– respondió decidida
Kara.
-A partir de ahora partirás
a La Tierra y cumplirás con su decisión-.
Dicho el veredicto por parte
del Concejo, la joven tomó un respiro, volteó y acercó a sus padres para
abrazarlos.
-Espero que tomes la mejor
decisión mi querida Kara– expresó Allura.
-Nosotros estaremos
pendientes de lo que vas hacer, luego nos avisas– requirió Zor-El.
-Haré lo posible en regresar
después de cumplir con mi promesa– aseguró Kara, quien los abrazó con cariño a
sus padres.
Luego, la joven kriptoniana caminó,
subió a la nave y emprendió su viaje hacia La Tierra, despidiendo de su ciudad
natal.
Cuando la nave llegaba a las
aguas del Planeta Tierra, Kara salió de la nave, se volteó y lo llevó con
fuerza, saliendo a la superficie terrestre del río hacia una de sus costas; después
examinó a su alrededor, era el mismo lugar del cual llegó por primera vez; en
seguida, ocultó su nave y descansó, para que al instante buscaría a su primo.
En una de las carreteras que
transportaban de Metrópolis hacia Smallville, venían en el automóvil: Lois,
quien conducía, Clark (quien había regresado a Metrópolis) y Jimmy; los tres vinieron
para pasar unos días de descanso en Smallville. Durante el transcurso del
trayecto, el auto se detuvo en una estación gasolinera que quedaba a pocos kilómetros
de la orilla del río, los tres bajaron del auto para entrar a la cafetería,
mientras uno de los empleados llenaba la gasolina al auto.
Cuando comían, Jimmy y Lois
discutían sobre el noviazgo que tenía el joven camarógrafo con Lucy, hermana de
Lois; por su parte Clark sintió algo raro, como si algo avisara, pero no era una
sensación de peligro.
-A ver Jimmy– dijo seria Lois
–si vas a enamorar de mi hermana, es importante que sepas que mi familia es una
familia decente, lo cual tenemos ciertas condiciones…-.
-Lo sé Lois, pero no es para
que se altere, solo por el hecho de que Lucy y yo seamos novios…- manifestó
Jimmy, tomando una malteada, mientras escuchaba los diferentes puntos que
explicaba su compañera.
Clark miró por la ventana de
la cafetería a la orilla del río, pensando en aquella sensación que percibía.
-Espero que le quede bien
claro– advirtió Lois, quien miró a Clark -¿O no es cierto Clark? ¿Clark?... ¡Clark!–
La exclamación de Lois quitó la mirada perdida de Clark, quien se asustó -¿Quiero
saber por qué miras a la ventana y no participas en esta conversación?-.
-¿Eh?… la verdad es… que estoy
mirando lo hermoso que es el paisaje– mintió Clark, disimulando una sonrisa en
su rostro.
-Definitivamente tengo que
soportar a estos compañeros– expresó agriada Lois.
-Tranquila Lois– pidió Clark
–si quieren, continúen hablando, mientras yo estaré un rato en la orilla del
río y respirar aire puro-.
-Está bien, pero no te demores,
porque tenemos que revisar el auto para llegar a Smallville– tras indicar Lois,
Clark agradeció y salió de la cafetería, caminando hacia las orillas del río.
A medida que Clark acercaba
al río, sintió más fuerte esa sensación, de igual manera, lo sintió en el otro
lado Kara, quien se levantó y se escondió para ver quién era, Clark decidió en
mostrar su verdadera identidad como Superman, revisó entre los arbustos y
encontró la nave, tras reconocer a su primo, Kara salió de su escondite y se detuvo
detrás de él.
-Me imagino que te llamas
Kal-El, ¿verdad?– al escuchar la pregunta, Superman volteó y se sorprendió,
viendo a una hermosa joven, más baja de estatura, con cabello rubio largo y
rostro angelical; llevando un traje similar al que él llevaba puesto.
-Es cierto, lo soy, pero ¿me
conoces? ¿Eres también de Kriptón? – Preguntó Kal, bastante desconfiado.
-Vengo de Argos City, mis
padres eran de Kriptón, me llamo Kara, hija de Allura y Zor-El, por lo tanto,
soy su prima– respondió contenta la joven, Kal aún estaba sorprendido.
-No entiendo, ¿eres mi
prima?– Siguió examinando Superman.
-Así es– manifestó Kara.
Supergirl, basado del personaje de la Androide 18 de Dragon Ball Z (de Akira Toriyama), hecha por Juan Carlos Quenguan. |
-Se supone que soy el único
sobreviviente de la explosión de Kriptón, además, mis padres nunca me contaron
que tenía más familiares– expresó reflexivo Kal.
-¿Cómo así Kal?– asombró
Kara –mis padres sobrevivieron al lado de los habitantes de Argos City de la
explosión y hoy están en el espacio interior, de allí vine, porque quiero cumplir
una misión que tiene que ver contigo, también, en tomar una decisión importante
para mi vida-.
-¿Cuál es esa misión?– Indagó
Kal, cruzando sus brazos.
-En proteger a este planeta
y a ti, porque, tendrás muchos problemas de ahora en adelante; es algo grave que
pasará por una guerra entre países, por esa razón, tu vida corre peligro–
advirtió Kara, cambiando de parecer a su primo.
-Pero ¿cómo vas a saber? – Dudó
Superman – me comprometí en no interferir en la historia de La Tierra, imagino
que tú también debes saber-.
-Entiéndame Kal– exhortó
Kara –es un asunto importante, incluso, ¿sabes quién va hacer lo imposible para
matarte? Lex Luthor-.
-Sobre Luthor siempre lo sé,
no obstante, él está cumpliendo una condena por varios años en la cárcel– al comentar
Superman, su prima siguió reclamando.
-Entonces ¿sabes que Luthor
se escapó de la cárcel?–
-No te creo Kara– negó Kal
con la cabeza –mira, hagamos lo siguiente, te llevaré a la Fortaleza de la Soledad
y allá aclararemos toda esta discusión; por ahora, como viniste hasta acá, requiero
que no te muevas, hasta que yo regrese e iremos allá-.
-De ninguna manera me
quedaré esperando, es mejor que te acompañe, usando una identidad falsa que
tengo– propuso Kara.
-¿Cómo así?– preguntó
sorprendido Superman – ¿viniste antes a La Tierra?-.
-Sí, vine antes en una
misión diferente que era buscar el Omegahedron, por lo cual, investigué la
forma para que no me conocieran por mi verdadera identidad, me hice pasar como
Linda Danvers, una estudiante del Colegio Femenino de Smallville– explicó Supergirl.
-Bueno…- El hombre de acero
tomó un respiro –si esa es tu otra identidad, por mí no hay problema, pero te
advierto: primero, te quedarás en la granja de los Kent y cumplirás con sus estudios;
segundo, si vas a donde trabajo, es decir al Daily Planet, me avisas antes de
que vayas; tercero, espero que no te expongas ante la kriptonita, porque como
eres joven, perderás tus poderes y para recuperar necesitas descansar por horas-.
-No me gusta esas
condiciones, pero las acataré– reconoció incómoda Kara –si quieres, te cuento
lo que me pasó cuando vine por primera vez a este planeta…-.
-Antes que me cuentes,
quiero saber ¿con qué traje vendrás como Linda Danvers?– examinó Kal.
La kriptoniana pensó y
caminando alrededor de la nave, cambió su traje de Supergirl por el traje de
estudiante de colegio, su cabello rubio y largo se volvió de color café oscuro
y corto a los hombros, dejando pasmado a su primo.
-Será mejor que yo mismo te
consiga ropa adecuada– Kal hizo lo mismo y se vistió como Clark –cuando
lleguemos a Smallville, te recomiendo algo de ropa para que lo uses-.
-¡AAHHH!– Kara recordó algo –necesito
que me ayudes en esconder la nave, por favor-.
Ambos buscaron un lugar
adecuado para esconder la nave, al encontrarlo, lo metieron en unos arbustos
cerca de una pequeña cueva, después, se fueron hacia la cafetería. Allá Lois y
Jimmy distinguieron a Clark, quien venía acompañado.
-No lo puedo creer–
reaccionó Lois - ¿Se puede saber por donde andabas?, ¿y esa señorita?... la
recuerdo, pero no sé en dónde… -.
-¿Eres tú Linda?– preguntó
Jimmy.
-Claro, ¿cómo estás Jimmy?
Hace tiempo que no nos veíamos – saludó sonriente Linda.
-Linda es mi prima– habló
Clark, quien tomaba su malteada –apenas la encontré, ya que vino de otra
ciudad, para regresar al Colegio Femenino y terminar sus estudios de secundaria
-.
Lois dudó, tratando de
recordar vagamente sobre Linda.
-¿Te acuerdas que estuve en Smallville,
cuando ocurrió los graves incidentes que ocasionó Selena cuando quería gobernar
al mundo?– preguntó Jimmy a Lois.
-Claro que lo recuerdo–
respondió Lois –pero la verdad no había visto a ti Linda, del mismo modo, mi
hermana habló bien de ti. Lo que no entiendo es, ¿por qué llevas el traje de
uniforme del Colegio Femenino?– tal duda dejó incómodo a Clark.
-La verdad es que me
acostumbré en poner este uniforme, porque me siento bien, además, debo regresar
lo más pronto posible al colegio para continuar mis estudios– mintió Linda.
-Pero Linda, si habíamos
acordado que cuando regresemos, te consigo ropa adecuada para que lo uses– señaló
sonriente Clark.
-Lo sé primo… - manifestó un
poco avergonzada Linda.
-Bueno, si quieres, nos
puedes acompañar durante el resto de la travesía hacia Smallville– propuso Lois.
-Por mí, encantada…-
respondió sonriente Linda.
Todos se retiraron de la
cafetería, luego se montaron en el automóvil y continuaron con el viaje. Al atardecer,
llegaron a Smallville, directamente a la granja de la familia Kent, donde dejaron
a Clark y a Linda; por lo anterior, Lois y Jimmy fueron hacia un aparta-hotel
para pasar la noche.
Escrito
inicialmente el día miércoles, 10 de enero de 2010
Publicado
para el Sitio Bagatela, Fanfiction y Facebook: viernes, 24 de diciembre de
2010.
Primera
corrección: 5 de febrero de 2012.
Segunda
corrección: miércoles, 07 de noviembre de 2012.
Tercera
corrección: lunes, 27 de julio de 2015.
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