Supergirl y La Fuerza Energética, Capítulo VI

PRIMER FANFIC: SUPERGIRL Y LA FUERZA ENERGÉTICA

Imagen el escudo por DC Comics.

SEXTO CAPÍTULO: MONSTRUO NOCTURNO.

Supergirl, basado del personaje de la Androide 18 de Dragon Ball Z (de Akira Toriyama), hecha por Juan Carlos Quenguan.

Saliendo del hospital rumbo a las habitaciones del internado del Colegio Femenino, Linda pensaba una y otra vez sobre el beso que dio Ethan a sus labios, cuando ella lo salvó como Kara; en verdad, era el primer beso que recibía, sintiendo una paradójica sensación hacia aquel joven jardinero; sin embargo, ese suceso consintió su felicidad, acariciando sus labios con los dedos de su mano derecha.

Selena, por su parte, se indagaba una y otra vez sobre la aparición de aquella chica.

-No entiendo sobre ella, tampoco sé de dónde llegó, lo que si sé es que robó a mí apuesto jardinero y eso no la voy a perdonar-.

-Selena, tienes que ser fuerte, seguramente todo ser humano se enamora realmente de quien le guste…- Bianca trató de tranquilizar a Selena.

-¡Pero yo quiero tener a ese joven en mis brazos!– insistió Selena.

-En definitiva no lo amas, solo quieres experimentar con él– trató de meter en razón Bianca, aunque Selena omitió caso, preparando algo de inmediato.

Sacó el cofre negro donde estaba el Omegahedron y elaboró un conjuro para encontrar a Supergirl y destruirla. Entre las frases de su conjuro, mencionó.

-Ordeno que encuentres a aquella jovencita quien usurpó a mí querido… cuando la encuentres, elimínela…-.

Bianca no estuvo de acuerdo, más bien, decidió no interrumpir; ya que sabía que Supergirl tiene los mismos poderes de Superman y era dificultoso que Selena controle la magia para acabar con aquella adolescente.

Recitado el conjuro, salió un fuerte remolino desde el cofre negro, mostrando la apariencia de un monstruo invisible quien rompió una de las paredes de la habitación de Selena, dejando horripiladas a ambas.

-Creo que se me fue de las manos– comentó Selena.

-Claro, si lo hicieras el conjuro afuera, no ocurriría esto– aseveró Bianca.

-Pues mañana pediremos que arreglen la pared, mientras veré en el espejo para encontrar a esa chiquilla entrometida– dicho eso, Selena partió a ver lo que pasaría.

El monstruo franqueó con pasos agigantados buscando a Supergirl, destruyendo todo lo que transitaba: árboles, carros, tierras, muros.

Linda llegó a su habitación, se acostó en la cama e imaginó lo que haría si se enamorara de Ethan. Podía llevarlo a todos los lugares, compartiría con él en todas partes, hasta acompañar en aventuras de enamorados.

Linda/Supergirl, basado del personaje de la Androide 18 de Dragon Ball Z (de Akira Toriyama), hecha por Juan Carlos Quenguan.

Sin embargo, los fuertes ruidos desde afueras la hizo despertar, la estudiante se levantó de la cama, caminó hacia la ventana, abrió las persianas viendo un fuerte remolino que arrasaba todo lo que encontraba, rompiendo el muro y dañando un auto cerca de las instalaciones del Colegio Femenino.

Linda se enojó, sin pensar se lanzó de la ventana, cambiando de repente a Supergirl, volando hacia la calle cercana al colegio, donde se detuvo haciendo una señal de alto con su mano derecha.

-¡Alto ahí! ¡No destroces más!– gritó Kara.

Selena, al ver que apareció la joven, se encolerizó.

-Por fin la encontré… quiero saber ¿dónde está mi amado?–.

La pregunta de Selena sonó como una orden al monstruo invisible, quien atacó a Kara, lanzándola con sus extremidades hacia la pared del colegio, quien sufrió un golpe a espalda y cayó al suelo. Enfurecida Kara se levantó y atacó de una vez, pero fue interceptada por el monstruo, quien la golpeó contra el suelo.

-Así se hace Selena– alentó Bianca.

Selena se concentraba en dar órdenes al monstruo, quien al instante lanzó a Kara hacia una malla de protección, luego la arrojó contra un poste de luz, golpeándola con bastante fuerza. Kara trató de pensar, miró el poste y ocurrió una idea: rompió el poste, se escapó del monstruo y voló hacia las nubes oscuras, donde aprovechó en atraer los rayos con el poste de metal.

En ese momento, Bianca celebró.

-¡Por fin, lo logramos!-.

-No… creo que no – señaló Serena en tono serio, no descartaba que Supergirl tuviera una estrategia para vencer al monstruo.

En efecto, la bruja tuvo razón. Tras recibir bastante energía eléctrica en el poste, Kara voló hacia el colegio, encontró al monstruo, se puso de frente; extendió el poste y expulsó la energía eléctrica directamente al monstruo; a quien lo dejó descubierto, neutralizado y reducido por completo.

Selena, al ver que su monstruo era vencido, se irritó.

-¡Rayos! ¡Es increíble!, si el trabajo de salvar a este mundo no lo hace Superman, lo hace esa chiquilla entrometida de Supergirl-.

-Tenga paciencia Selena, es posible que haya otro método para aniquilar a Supergirl…– tranquilizó Bianca, quien sugirió -Si a Superman lo debilitan con una roca de meteorito, llamada kriptonita, podemos hacer lo mismo para amortiguar a Supergirl-.

-No me parece, quiero exterminarla con mi propia magia, usando bastante energía de esta esfera, tendré otro método– rehusó Selena –además, si a ese joven jardinero lo llevaron al hospital de Smallville, pues allá estaremos y a él lo convenceré para que sea mío y de nadie más -.

Después de vencer al monstruo, Kara pensó caminando en el pasillo: “¿Quién está detrás de todos esos sucesos? ¿Acaso ese alguien está manipulando la energía del Omegahedron para conseguir sus propios planes?”. Cuando la hermosa joven llegaba a la entrada de las habitaciones, olvidando que debía entrar como estudiante, la señora Murphy se percató desde el cuarto en donde estaba viendo la televisión.

Supergirl, basado del personaje de la Androide 18 de Dragon Ball Z (de Akira Toriyama), hecha por Juan Carlos Quenguan.

-¡Vaya! Señorita, usted no es alumna de este colegio, ¿qué estás haciendo por acá a estas horas de la noche?-.

Kara se asustó y recordó.

-Pues verás, lo que pasa es que yo…-.

-Y viene con este atuendo tan sensual, ¿acaso hoy es día de disfraces? Por lo menos, deberías venir bien vestida y no con esos trapos- la señora interrumpió seria.

-Perdóname señora, no volveré a cometer imprudencias en venir a estas horas de esta manera– disculpó apenada Kara.

-Puedes entrar, pero la próxima vez no vengas con esos trapos tan ridículos, ¿acaso se cree familiar de Superman?-.

“Sí, soy su prima…” pensó Kara, quien se tapó el escudo de su pecho con su mano derecha, yendo rápidamente hacia su habitación.

Mientras Kara se cambió para vestirse como Linda, Selena analizó sobre la energía del Omegahedron de manera cuidadosa durante toda la noche.

Una hora después, Linda consideró decepcionada por no encontrar el Omegahedron. Sentada en su cama antes de dormir empezó a recapacitar, sacó la pulsera de su mano izquierda tirándola contra el suelo, sintiéndose resignada por que era imposible encontrar la fuerza energética.

Sin embargo, en el momento que quería acostar la pulsera brilló, en ese momento, Linda escuchó que alguien la llamaba: “Kara, ¿estás ahí? Necesitamos que nos puedas responder…”.

Linda pensó que era un sueño, aunque, el segundo llamado la despertó al instante: “Kara por favor, respóndanos…”. Linda echó un vistazo a su pulsera y escuchó las voces de sus padres, cogió la manilla plateada, entró al baño y la colocó en la muñeca de su mano izquierda.

-¿Mamá? ¿Papá?– tras averiguar, el brazalete resplandeció, proyectando el haz de luz al espejo del baño.

El aspecto de Linda se transformó al semblante de Kara.

-Si hija, somos nosotros… La situación por acá empeora poco a poco, estamos respirando con bastante dificultad y la energía escasea, por esa razón, todo lo que usamos está paralizado y varios de nosotros estamos enfermos…– las palabras de Zor-El entristeció a su hija.

-Kara, sabemos que estás triste por no encontrar el Omegahedron, pero tienes que ser fuerte. Tampoco queremos que te desesperes, sabes muy bien que si te encolerizas, podrías perder la razón y la calma que siempre te caracterizas…- alentó Allura.

-¿Pero cómo madre?– Indagó triste Kara –cada vez que la pulsera percibe la energía, lo único que encuentro son monstruos y espectros creados por un ser humano que está usando el Omegahedron -.

-Esa persona sabe que estás en el planeta Tierra y te está buscando… - reveló Zor-El –solo para destruirte, pero estamos seguros que puedes derrotar a esa persona y encontrar lo más pronto posible la fuerza energética para traerla de regreso…-.

-Ánimo Kara…- incitó Allura –nosotros resistiremos, demuéstrate a ti misma que puedes cumplir con tu misión… sabemos que sí puedes… esfuérzate mi querida Kara… nosotros te acompañaremos siempre, desde el fondo de nuestros corazones…-.

Luego de ver a sus padres, el resplandor reflejado en el espejo se desvaneció, la hermosa joven se tranquilizó, tomó un respiro y miró al espejo.

-Tengo que lograr, estoy segura que todo va a salir bien, voy a cumplir con mi misión– mirando a la pulsera, recordó a sus padres y a Zaltar – no se preocupen, efectuaré con mi deber, nunca los defraudaré-.

Dicho eso, Kara salió del baño y se acostó en la cama, pensando en lo que hará en el siguiente día, sin embargo, pensó: “Aunque antes, visitaré por la mañana a Ethan en el hospital, como Linda, después de eso, continuaré averiguando sobre el Omegahedron”.

Escrito inicialmente el día jueves, 4 de febrero de 2010.

Editado para el Sitio Bagatela el lunes 23 de agosto de 2010.

Primera corrección: miércoles, 18 de enero de 2012.

Segunda corrección: miércoles, 31 de octubre de 2012.

Tercera corrección: miércoles, 02 de julio de 2014.